la etiqueta energética
LA ETIQUETA ENERGÉTICA
La etiqueta energética es una pegatina que se les pone a los electrodomésticos en los puntos de venta, para que el consumidor pueda valorar como es de eficiente un equipo determinado con respecto a otro de la misma gama.
Da una idea del consumo de varios factores como el eléctrico, de agua, tiempos de funcionamiento, capacidades y otros elementos que varían con cada electrodoméstico, para que el consumidor pueda hacer la compra más adecuada en cuanto a la relación calidad-precio-eficiencia.
Hay dos versiones de etiquetado energético, el original con niveles desde G hasta A y uno revisado que incluye los nuevos niveles A+, A++ y A+++. En principio es obligado para los electrodomésticos que más electricidad y agua consumen, como son:
- Frigoríficos, congeladores y aparatos combinados.
- Lavadoras, secadoras de ropa y aparatos combinados.
- Lavavajillas.
- Hornos.
- Fuentes de luz.
- Aparatos de aire acondicionado.
Ha de recopilar información como:
- Consumo de energía eléctrica
- Nivel de consumo
- Datos complementarios, dependiendo de cada tipo de electrodoméstico.
- Modelo y fabricante.
- Normas y métodos de medición
El nivel de consumo de referencia es el nivel D, el resto de niveles indican el ahorro del equipo con respecto al de referencia, es decir que un electrodoméstico de clase A++ consume menos de un 30% del consumo de un equipo de clase D. Aquí se muestran las relaciones de ahorro de los distintos niveles energéticos:
- A+++ menos del 20%
- A++ menos del 30%
- A+ entre el 42% y el 30%
- A entre el 55 % y 42 %
- B entre el 75 % y 55 %
- C entre el 90 % y 75 %
- D entre el 90% y 100 %
- E entre el 110% y el 100
- F entre el 125 % y el 110 %
- G superior al 125 %